Chicki la bebé pianista
Mónica Esparza Patiño
A mi amada Chicki con todo el corazón de tu Monchi.
Chicki era una bebé muy buena y amorosa, tan bella como una rosa, ella había nacido un día después de Santa Rosa. Siempre se esmeraba por ir en busca de sus sueños. Un día su mami le dijo:
Chicki tu serás una gran pianista, nunca lo dudes, no conozco a nadie tan perseverante como tu, debes siempre ir en busca de tus sueños y nunca abandonarlos.
- Lo se mamá, le decía Chicki siempre con una enorme sonrisa en el rostro en el que se formaban dos hermosos ollitos en las mejillas.
Un día Chicki le dijo a mamá:
Tenías razón mami, cada vez voy tocando mejor las piezas, ven y escúchame.
Y su mamá se sentaba con ella y la aplaudía y acompañaba en sus prácticas de piano.
Un día fue el primer recital de Chicki y ella se puso muy nerviosa pues era pequeñita y el piano de cola le queda enorme.
- Mami, le dijo, crees que podré lograrlo.
- Claro que lo lograrás Chicki no debes temer, has practicado mucho tus melodías y lo harás muy bien.
En el momento que Chicki subió al escenario lo vio gigante pero recordó los consejos de su mami y Chicki tocó tan bello que todos la aplaudieron.
Cuando Chicki creció fue una de las más grandes pianistas, su sencillez y belleza interior resplandecían como rayos de luz en los escenarios donde ella tocaba y era aplaudida por muchos corazones.
FIN
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